La ventaja de contar con datos más inteligentes

Las empresas de gestión de activos están bajo más presión que nunca. Ya no basta con que el mercado vaya bien para garantizar buenos resultados. Hoy, en un entorno marcado por la incertidumbre económica, la inestabilidad geopolítica y la velocidad de la innovación tecnológica, la verdadera ventaja competitiva está en la innovación, la eficiencia operativa y la experiencia del cliente. Y en el centro de todo ello hay un activo que, aunque intangible, lo cambia todo: los datos.

Una encuesta global realizada por InterSystems a 375 empresas de gestión de activos deja algo muy claro: los datos ya no son solo el resultado de las operaciones, sino un factor clave de diferenciación estratégica.

Aun así, muchas organizaciones siguen luchando con sistemas obsoletos, datos aislados y procesos manuales que frenan su capacidad para innovar y competir.

Este artículo repasa las principales conclusiones del informe de InterSystems “Datos: un factor de diferenciación competitiva”, que muestra cómo los gestores de activos pueden convertir sus desafíos de datos en oportunidades reales de crecimiento.

Aunque cada vez más empresas reconocen el valor estratégico de los datos, los retos siguen siendo enormes. No se trata solo de cuestiones técnicas: los problemas con los datos tienen impacto directo en el negocio. Algunas de las consecuencias son los informes imprecisos, las decisiones lentas o erróneas y las dificultades para cumplir la normativa.

La encuesta de InterSystems muestra que muchas firmas se enfrentan a una red compleja de fuentes de datos, sistemas heredados y procesos manuales, que limitan su acceso a información fiable y actualizada.

Para muchas organizaciones —especialmente las más pequeñas—, gestionar datos de forma eficaz sigue siendo una tarea abrumadora. Reconocer el alcance del problema es el primer paso para resolverlo.

Más del 54 % de las empresas tienen problemas por errores en los datos. La raíz está en la diversidad de fuentes de información y en la cantidad de trabajo manual que exige integrar, validar y conciliar la información.

Estos errores no solo ralentizan la toma de decisiones, sino que incrementan el riesgo de incumplimientos normativos y elevan los costes operativos. En un sector donde la precisión lo es todo, la fiabilidad de los datos se convierte en una prioridad estratégica.

¿Cuáles son sus tres principales desafíos actuales relacionados con la gestión de datos?	¿Cuáles son sus tres principales inductores de negocio para mejorar la gestión de datos?
Supresión de errores - 54% Mejora de la respuesta a las solicitudes de los reguladores — 44 %	Supresión de errores — 44 % Respuesta rápida a las solicitudes de la empresa — 41 %

Solo el 3 % de las empresas usa datos con menos de 5 horas de antigüedad para elaborar sus informes. Lo que es aún más sorprendente es que ninguna empresa que gestione entre 100 000 y 500 000 millones de dólares en activos emplea datos de menos de una hora de antigüedad. Este retraso en la actualización de los datos limita considerablemente la capacidad de las empresas para responder a los cambios del mercado en tiempo real. El acceso a datos actuales proporciona una ventaja competitiva significativa que les permite tomar decisiones oportunas y fundamentadas.

A pesar de contar con menos recursos, las pequeñas y medianas empresas suelen utilizar entre 20 y 29 fuentes de datos, un número similar al de sus homólogas más grandes. Esto supone una carga desproporcionada para sus equipos. De hecho, el 41 % de los encuestados afirma que sus equipos de datos y el personal de TI dedican hasta el 50 % de su tiempo a atender las solicitudes de datos de otros departamentos de la empresa.

¿Qué parte de su tiempo colectivo dedica el equipo de TI y/o de datos a atender las solicitudes de datos del personal de la empresa?

• Hasta un 10 % — 18 %
• Del 11 % al 25 % — 26 %
• Del 26 % al 50 % — 41 %
• Del 51 % al 75 % — 7 %
• Del 76 % al 100 % — 7 %

El informe lo deja claro: los datos son el nuevo campo de batalla para obtener una ventaja competitiva. A medida que el panorama financiero se vuelve más complejo y competitivo, la capacidad de acceder rápidamente a datos precisos y actuar en consecuencia se convierte en un factor de diferenciación clave.

Las empresas de gestión de activos disponen ahora de más datos que nunca, lo que aumenta la necesidad de soluciones avanzadas de gestión de datos. Aquellas que pueden optimizar sus operaciones de datos están mejor posicionadas para responder a los cambios del mercado, cumplir las exigencias normativas y ofrecer una experiencia superior a los clientes. Además, los datos son la base de tecnologías emergentes como la inteligencia artificial y el machine learning, que prometen revolucionar las estrategias de inversión y los flujos de trabajo operativos.

La gestión de los datos empresariales entre diversos sistemas y arquitecturas es esencial para aprovechar al máximo estas tecnologías. En este contexto, la gestión de datos no es solo una cuestión administrativa, sino una prioridad estratégica que puede impulsar el rendimiento, la innovación y el éxito a largo plazo. Las empresas que pueden aprovechar sus datos de manera eficaz obtienen beneficios en varias áreas fundamentales:

El acceso en tiempo real a datos limpios e integrados permite a los equipos de primera línea tomar decisiones de inversión más informadas. Esta agilidad es crucial en mercados volátiles, donde elegir el momento adecuado puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso de la operación.

Con mejores datos se obtiene una mayor visibilidad de las exposiciones, las correlaciones y la dinámica del mercado. Esto facilita gestionar el riesgo de forma proactiva en lugar de limitarse a reaccionar a posteriori.

Los reguladores exigen más transparencia y una presentación de informes más rápida. Las empresas con una infraestructura de datos robusta pueden responder con mayor rapidez y precisión, lo que reduce los costes de cumplimiento normativo y evita sanciones.

Hoy en día, los clientes esperan poder acceder a información personalizada de forma rápida. Una visión unificada de los datos de los clientes permite a las empresas ofrecer servicios personalizados y establecer relaciones más sólidas.

Es alentador ver cómo el sector está respondiendo a estas demandas. Conscientes de las limitaciones de sus actuales infraestructuras de datos, muchas empresas de gestión de activos prioirizan su inversión en estrategias de datos más inteligentes. Este cambio está impulsado por la necesidad de eliminar ineficiencias, reducir errores y proporcionar a los usuarios de negocio un acceso más rápido a la información.

Según la encuesta de InterSystems, una amplia mayoría de las empresas tiene previsto mejorar sus capacidades en materia de datos en un futuro próximo. Esto incluye adoptar nuevas tecnologías, replantearse las arquitecturas de datos y fomentar una cultura de toma de decisiones basada en datos.

Muchas empresas ya están adoptando nuevos enfoques, como las estructuras de datos, para unificar y gestionar datos procedentes de múltiples fuentes. Los componentes esenciales de estas arquitecturas modernas incluyen robustos pipelines y servicios de datos, que permiten una integración y entrega fluidas de los datos en toda la organización. La base de estas estrategias de datos más inteligentes son unos procesos sólidos de recopilación y preparación de datos, que garantizan su calidad y su disponibilidad para el análisis.

El avance hacia estrategias de datos más inteligentes refleja una tendencia más amplia en el sector: el reconocimiento de que los datos no son únicamente un subproducto de las operaciones, sino un factor clave para obtener una ventaja competitiva. Según los datos de la encuesta:

• El 73 % de las empresas tiene previsto invertir en capacidades adicionales de gestión de datos.
• Entre los principales inductores de negocio se encuentran la supresión de errores, la mejora de la capacidad de respuesta a las necesidades empresariales y la reducción de los costes de gestión de datos.

Este cambio refleja un creciente reconocimiento de que los datos no son solo una cuestión de TI, sino una necesidad de negocio.

Para aprovechar todo el valor de sus datos, los gestores de activos deben replantearse su enfoque. Una estrategia de datos moderna va más allá de la simple recopilación y almacenamiento de información. Conlleva la creación de un ecosistema dinámico e integrado que permita el acceso en tiempo real a datos de alta calidad en toda la organización, con un flujo y una transformación de datos fluidos entre los distintos sistemas para garantizar unas operaciones unificadas y eficientes.

Esto requiere una combinación de nuevos enfoques de arquitectura, automatización, marcos de gobernanza robustos y una comprensión clara de las necesidades de negocio. Los principales componentes incluyen  Smart Data Fabrics que unifican fuentes de datos heterogéneas, herramientas de automatización que reducen el esfuerzo manual y plataformas de análisis de autoservicio que capacitan a los usuarios de todos los niveles. La automatización y la gobernanza también deben aprovechar la coordinación de datos para garantizar el cumplimiento normativo y la eficiencia operativa.

Es importante destacar que una estrategia de datos moderna debe ser escalable y adaptable, de forma que pueda evolucionar con los objetivos de la empresa y el panorama general del mercado. Al habilitar el análisis de datos avanzado y proporcionar información de negocio proactiva, los gestores de activos pueden aprovechar todo el potencial de sus datos. Estos son los cinco pilares de una estrategia de datos moderna:

Un Smart Data Fabric integra los datos de fuentes aisladas, ya sea en las propias instalaciones, en la nube o de fuentes externas, sin necesidad de duplicarlos. Esto permite el acceso en tiempo real a una vista unificada de los datos, lo que mejora notablemente la velocidad y la precisión.

La automatización de la entrada, limpieza y conciliación de los datos reduce el esfuerzo manual y los errores. Incorporar una capa de inteligencia artificial a esta base permite descubrir patrones, predecir tendencias y generar información valiosa.

Dotar a los usuarios de negocio de herramientas intuitivas para el acceso y análisis de los datos reduce la dependencia de los servicios de TI y acelera la toma de decisiones.

A medida que los datos se vuelven más accesibles, la gobernanza cobra más importancia. Las empresas deben garantizar la calidad, la trazabilidad y el cumplimiento normativo de los datos, a la vez que protegen la información confidencial.

Una plataforma de datos moderna debe adaptarse al crecimiento del negocio y a las nuevas fuentes de datos, requisitos normativos y condiciones del mercado.

Uno de los ejemplos más convincentes de la aplicación de la transformación basada en datos a la gestión de activos se puede ver en el ámbito del cliente. Una destacada empresa de gestión de activos ha implementado recientemente una arquitectura de Smart Data Fabric para unificar y optimizar su infraestructura de datos. Como resultado, los clientes ahora se benefician del acceso a informes interactivos en tiempo real, que ha transformado por completo la forma en que interactúan con sus carteras. 

En lugar de esperar los extractos mensuales o las reuniones programadas con el asesor, tienen acceso seguro a un cuadro de mando personalizado que se actualiza en tiempo real. Esta plataforma les permite ver el rendimiento actual de la cartera, la asignación de activos, la exposición al riesgo y las tendencias del mercado, todo en una única interfaz intuitiva. Pueden filtrar datos, realizar comparaciones e incluso explorar escenarios hipotéticos para comprender mejor el impacto potencial de los movimientos del mercado.

El cambio ha sido profundo. Los clientes sienten que están mejor informados, tienen un mayor control y se hallan más conectados con sus estrategias de inversión. Los asesores, al contar con la misma información en tiempo real, pueden comunicarse de forma proactiva para hacer recomendaciones personalizadas, lo que fomenta una mayor confianza y colaboración. La transición de los informes estáticos a una interacción dinámica, basada en datos, ejemplifica cómo los Smart Data Fabric no solo mejoran la eficiencia operativa, sino que también enriquecen la experiencia del cliente, convirtiendo la transparencia de los datos en una verdadera ventaja competitiva.

Como hemos visto, las empresas de gestión de activos se basan en numerosas fuentes de datos para tomar decisiones diarias. Esto implica desenvolverse por un complejo ecosistema de data warehouse, lagos de datos y entornos en la nube, cada uno de los cuales contiene información valiosa, pero a menudo aislada. Lograr una verdadera integración e interoperabilidad de los datos es esencial para transformar esa información dispersa en un activo estratégico.

Los analistas e ingenieros de datos están al frente de estas iniciativas, trabajando para conectar una amplia gama de fuentes de datos. Mediante una arquitectura de Data Fabric, las empresas pueden unificar los datos aislados, lo que facilita su intercambio y transferencia, sin necesidad de duplicarlos. Este enfoque no solo agiliza la integración de datos, sino que también garantiza que los datos relevantes sean accesibles para quienes los necesitan, cuando los necesitan.

Con un Data Fabric unificado, los analistas de datos pueden realizar análisis más eficaces, aprovechando todos los datos disponibles para obtener información relevante para la toma de decisiones de negocio. Acabar con los datos aislados permite a los equipos colaborar de manera más eficiente, responder a los cambios del mercado de forma ágil y mantener una ventaja competitiva. En última instancia, una integración de datos robusta y la interoperabilidad son la base para una toma de decisiones más inteligente, rápida y fundamentada en la gestión de activos.

La inversión en la gestión de datos no solo tiene que ver con el cumplimiento normativo o la eficiencia, sino también con el crecimiento. Una mejor gestión de los datos ofrece beneficios tangibles desde varias perspectivas. Desde la perspectiva operativa, reduce el tiempo y el coste asociados al procesamiento manual de datos y la corrección de errores.

Desde la perspectiva estratégica, facilita una toma de decisiones más rápida y precisa, que puede mejorar los resultados de las inversiones y la satisfacción de los clientes. Y desde la perspectiva del cumplimiento normativo, garantiza la presentación de informes puntuales y precisos, lo que reduce el riesgo de multas y daños a la reputación. Aunque, quizás, lo más importante es que sienta las bases para la innovación, lo que permite a las empresas desarrollar nuevos productos, entrar en nuevos mercados y responder de manera más eficaz a las tendencias emergentes.

En un sector tan competitivo, con márgenes ajustados y expectativas elevadas, el retorno de la inversión en gestión de datos es claramente cuantificable y significativo. Las empresas que gestionan correctamente sus datos pueden:

• Reducir los costes operativos mediante la automatización de los procesos manuales.
• Acelerar la obtención de información para tomar decisiones más rápidas y acertadas.
• Aumentar la satisfacción del cliente gracias a un servicio personalizado y ágil.
• Mejorar el cumplimiento con informes más rápidos y precisos.
• Impulsar la innovación mediante la creación de nuevos productos y servicios basados en datos.

En el caso de los gestores de activos, la gestión eficaz de los datos es la piedra angular del éxito de las estrategias de inversión y la excelencia operativa. Para garantizar que sean fiables y útiles, las empresas deben adoptar una serie de prácticas recomendadas que abarcan todo el ciclo de vida de los datos, desde la captura y transformación hasta el almacenamiento e integración.

Es esencial contar con una arquitectura de datos sólida, como un Smart Data Fabric, que proporcione un repositorio central que admita todos los tipos de datos y permita su integración fluida en toda la organización. Los gestores de activos deben implementar controles rigurosos de calidad, garantizando que solo los datos precisos y relevantes sirvan de base para las decisiones de inversión. La seguridad es igualmente importante; los controles de acceso robustos y el cumplimiento de las normativas de privacidad de datos protegen la información confidencial y preservan la confianza de los clientes.

El uso de tecnologías avanzadas, como el machine learning y la inteligencia artificial, puede mejorar aún más la toma de decisiones basada en datos. Estas herramientas permiten a los gestores de activos analizar conjuntos de datos grandes y complejos, obtener información valiosa y responder de forma proactiva a las tendencias del mercado. Al incorporar estas prácticas recomendadas en sus procesos de gestión, los gestores de activos pueden fomentar una cultura basada en los datos que impulse la innovación, el cumplimiento normativo y el éxito empresarial a largo plazo en la economía digital actual.

Aunque los desafíos relacionados con los datos en la gestión de activos están muy extendidos, no son insuperables. Con la estrategia, las herramientas y la mentalidad adecuadas, las empresas pueden lograr que dejen de ser una carga para convertirse en un activo valioso. Esta transformación exige un compromiso que va desde la aceptación por parte de los líderes hasta la colaboración entre departamentos, pero los beneficios son considerables. Las empresas que tengan éxito no solo mejorarán su eficiencia operativa y el cumplimiento normativo, sino que también obtendrán una ventaja competitiva a la hora de ofrecer valor a sus clientes. En un mundo en el que cada punto básico cuenta, disponer de datos más inteligentes no es solo una ventaja competitiva, sino también una necesidad competitiva.

InterSystems ofrece un enfoque transformador para la gestión de datos a través de su arquitectura de Smart Data Fabric, con la tecnología de  InterSystems Data Studio. Esta solución incluye un módulo de gestión de activos que está diseñado específicamente para abordar los entornos de datos fragmentados, propensos a errores y lentos a los que se enfrentan muchos gestores de activos. Al integrar completamente los datos de los sistemas internos, fuentes externas y plataformas en la nube, InterSystems permite el acceso en tiempo real a una visión unificada y fiable de la información.

El módulo de gestión de activos añade capacidades específicas del ámbito financiero, que incluyen modelos de datos preconfigurados, flujos de trabajo y conectores de datos adaptados a las empresas de gestión de activos. De esta forma, las empresas pueden reducir la conciliación manual, conectar los datos aislados y proporcionar información oportuna tanto a los equipos internos como a los clientes. Al ofrecer un soporte embebido para la gobernanza, la escalabilidad y el análisis basado en inteligencia artificial, InterSystems no solo optimiza las operaciones, sino que también posiciona a las empresas para innovar y competir de manera más eficaz en un mercado que depende de los datos.